De un día para el otro...

Hace una semana me agarró una de mis tantas crisis de "no se que carajo voy a hacer de mi vida, se pueden ir a la puta que los parió las carreras, las universidades y mi vocación inexistente". Digo, cada tanto me agarraba de esas crisis y de verdad, me ponía muy mal porque sentía que se me acababa el tiempo y no sabía nada, o si sabía algo pero no estaba segura, o cuando realmente decía "por fin, la encontré" había algo que me desmoronaba y arruinaba toda mi ilusión. Justamente, hace una semana un poco menos capaz, tuve una de esas y fue el pobre de mi novio que le tocó escuchar mis llantos. Había tenido casi todo un dia horrible, estaba mal de por si, triste. Viste cuando te pasa que de la nada estas triste y tenes motivos para estarlo pero que capaz surgen en un momento todos de la nada y estas triste y lo que es peor, TODO te molesta. Hasta la pelotudes mas grande que existe que incluso te preguntás a vos misma, ¿porque carajo me molesta esto? y así y todo te molesta, ¿y qué?. Bueno, volviendo, resulta que fue mi novio quien se banco que le cuente mi tedioso día y de mis miedos todavía latentes sobre lo que voy a seguir y la presión que me genera no saber y que me quedaba poco tiempo. El, como siempre, me contuvo y trató de hacerme olvidar por un rato el tema.
Esa misma semana, el jueves fui a un instituto a averiguar sobre una carrera. No me tenía mucha fe, va en realidad fui sin ninguna expectativa, solo a escuchar y a ver si algo de lo que me decían lograba entusiasmarme. Yo tenía (y tengo) pensado en ser profesora, pero con respecto a lo que yo quería seguir no habia mucha posibilidad de que pueda enseñar en un secundario, por lo atípico de la "materia". En fin, cuestión que fui. Entré al lugar y me quedé asombrada, era nose... raro pero me gustaba. Tenía un toque de originalidad en pequeñas cosas, como ami me gusta. Un señor me invitó a pasar a su oficina, la cual era muy cómoda. Me empezó a hablar de la carrera en si. A medida que me hablaba y respondía mis preguntas sobre la posibilidad de enseñar algo que se relacione en un secundario y las salidas laborales que podía tener se me fue formando una sonrisa en la cara. Escuchaba fascinada y no podía creer que me estaba gustando todo lo que me decía y que este señor había logrado lo que ninguno de los que habia escuchado por distintas carreras había logrado: entusiasmarme. 
Salí de ese lugar FELIZ. La felicidad que me generó haber encontrado algo a lo que yo diga SÍ, ES ESTO, ES ESTO!!!. Al día siguiente volví a inscribirme.
Todavía no puedo creer que de un día para el otro encontré lo que quiero hacer, lo que me llama la atención, lo que creo pueda hacerme feliz, mas allá de que también quiero ser profesora de eso o alguna materia relacionada que mi título avale.


FINALMENTE, puedo decir que di el primer paso de lo que es el comienzo de una nueva vida, del desarrollo de mi vida profesional. En mi caso, fue un paso que me costó dar, pero ahora estoy feliz y entusiasmada por lo que se viene, antes le tenía miedo.


El jueves pasado me inscribí en el ISEC para la carrera de Producción y Dirección para Radio y Tv.
Soy Feliz